Nota al lector: Perdón que este post haya tardado tanto publicarse. He estado unas semanas viajando sin parar por mi tierra: Andalucía.
Viajar por el mundo y olvidarse de la misma patria no tiene perdón, así que me he propuesto recuperar un poco y volver a visitar sitio que hacía tanto que no visitaba. Os podría escribir también sobre ellos, pero va a ser que no...
Bueno la publicación de Siem Reap:
Me encanta Camboya. Me encanta su gente. Y me encanta sus ciudades. Sobre todo Siem Reap. Vine para ver los templos de Angkor Wat en tres días y me quedé 10... por algo será.
Llegué una hora antes de lo previsto con el bus nocturno desde Phnom Penh, peor allí estaba mi tuk-tuk driver Tee listo para recogerme con un cartel con mi nombre: LOSADO.
Hice la reserva el día antes por teléfono y claro, ellos no pronunciar la R.
Como hasta las 7:00 no había nadie en recepción, me recliné en un cómodo sofá de la linda terraza de Jasmine Guesthouse. Cuando me desperté esta rodeado de gente en pleno desayuno. "Good morning, sir" Despertarse y lo primero en ver es un amigable sonrisa es impagable. Siempre puedes leer en la información de los alojamiento que el hotel es familiar y con ambiente acogedor. Mentira, luego llegas al hotel y zack zack. Eres un cliente más. Pero en Jasmine Guesthose estás de verdad con una familia. Ellos viven allí y te tratan como uno más. Se sientas contigo. Te sonrien y te preguntan sobre tu vida. Te invitan a jugar billar o si necesitas algo. Un lujo que no te dan ni lo hoteles de 5 estrellas, en serio. Hablarte de tú a tú. Sin barreras sociales o distancias de negocios. Buena gente en el sentido más grande de la expresión.
Por cierto, el lujo si tiene un precio: 2,10 € por noche incluído desayuno en un dormitorio de mi buen ver y super acogedor.
Quien siga de verdad pensando que viajar es caro, que se olvida ya de falsos resorts de 5 estrellas en los que no ves más que una playa y palmeras como el que pone un DVD o se sienta frente a un poster de Punta Cana.
Viajar es mucho más que gastar dinero. Viajar es ahorrar dinero. Y ganar en experiencias. Gente, historia, gastronomía, cultura. Viajar es más que ese DVD. En este viaje de 2 de meses por Asia lo he confirmado. Y es posiblente la decisión más acertada que haya tomado en mi vida.
Bueno, aún me queda mucho por delante, así que hoy os cuento sobre mis 10 días en Siem Reap.
La ciudad es pequeña, con uno 150.00 habitantes y se podría decir que la gente viene Siem Reap exclusivemente por los templos de Angkor. Se podría decir, sí, pero de mis 3 días en mente me quedé 10. por qué? Por su gente.
Quitando los 3 días de las visitas a los templos, me quedé pasando tiempo con la gente en la casa de huéspedes con el personal u otros huéspedes como Alex, un chico alemán de 21, que está también en la mitad de su viaje por el mundo de dos años.
Con él visité los templos, salí a tomar cervezas, jugamos billar o cenar.
En Siem Reap hay mucha vida más allá de los templos durante el día. Hay muchos mercados, mucha oferta gastronomíca y muchos bares. Una tentación demasiado grande como para pasar sólo 3 días viendo templos. De ahí los 10 días. Además con un presupuesto de 10 €, tienes incluído, alojamiento, las tres comidas, cervecitas, tuk-tuks y alguna comprita. Es o no ees barato viajar? por 10€ en Madrid sólo pude tomarte un cerveza y una empanadilla del tamaño del ratón de mi ordenador. El que no viaja, es porque no quiere.
En Siem Reap como en Phnom Penh también se puede ver la cruel diferencia entre la gente de dinero y la gente pobre. El turismo ha remarcado esta diferencia. Ves el hotel donde se quedó Angelina Jolie cuando viene a la ciudad con piscina en la habitación y ves las casas la gente de a pie. No es justo.
